La administración Biden puja por cumplir sus promesas de campaña, y entre los cambios legislativos propuestos se encuentra una reforma tributaria que promete cambiar la injusta distribución del peso fiscal sobre los contribuyentes. Entre otras cosas, se espera que esta reforma tributaria reduzca porcentualmente la recaudación sobre los estratos más bajos de la sociedad y la incremente sobre los sectores más ricos.
Aunque aún no se tienen detalles precisos sobre cómo se implementará esta reforma tributaria, se sabe que los aumentos de impuestos serán un componente esencial: la Secretaria del Tesoro, Janet Yellen, ha dicho que al menos parte del próximo proyecto de ley involucrará tasas mayores tanto para entidades corporativas como para individuos con altos ingresos.
Algunas medidas concretas que, según trascendió, están siendo contempladas o forman parte del futuro plan de reforma serán la expansión del alcance del impuesto a la sucesión, una reducción de las preferencias fiscales para algunos tipos de empresas (tales como compañías de responsabilidad limitada o sociedades comerciales), y un aumento del impuesto a las ganancias de capitales para los individuos que ganan al menos $1 millón de dólares anuales.
También se contempla elevar el impuesto corporativo a un 28% y aumentar el impuesto a los ingresos para quienes ganan más de $400,000 anuales y, además, permitirá financiar el próximo paquete de ayuda económica que impulsará el gobierno demócrata, el cual ya no se respaldará únicamente sobre la deuda estatal como fuente de financiamiento.
Para la administración Biden, los cambios planeados son una oportunidad no solo para financiar iniciativas clave como infraestructura, clima y ayuda ampliada para los estadounidenses más pobres, sino también para abordar las inequidades del propio sistema tributario.
«Toda su perspectiva siempre ha sido que los estadounidenses creen que la política fiscal debe ser justa, y él ha contemplado sus opciones de políticas a través de esa lente. Es por eso que la atención se centra en abordar la desigualdad de trato entre el trabajo y la riqueza”.
Declaró Sarah Bianchi, Jefa de Política Públicas de los Estados Unidos en Evercore ISI y ex asistente económica de Biden.
Si bien la Casa Blanca ha rechazado imponer un impuesto directo sobre la riqueza como lo propuso la senadora demócrata Elizabeth Warren, los objetivos de la reforma propuesta apuntarán a quienes tienen grandes patrimonios. Además, es probable que los aumentos de impuestos incluidos en el paquete más amplio de infraestructura y empleos impulsado por el gobierno necesariamente impliquen la derogación de partes de la reforma tributaria de 2017 introducida por Donald Trump, que beneficia a las corporaciones y a las personas poseedoras de grandes capitales.
Heather Boushey, economista de la Casa Blanca, remarcó que Biden no busca aumentar los impuestos para quienes ganan menos de $400,000 por año, sino que las nuevas tasas estarán dirigidas a “quienes se han podido beneficiar de esta economía y no han sido golpeados duramente por la pandemia”.
Aunque aún falta para que los cambios propuestos por la administración Biden entren en acción, si estás al día con tus impuestos puedes aprovechar los beneficios y alivios fiscales que el gobierno ha implementado a través del IRS.
En Futuro Tax sabemos que entender las regulaciones impositivas no es fácil, pero cometer errores en tu declaración de impuestos puede salirte caro en tiempo y dinero. Por eso contamos con un equipo de profesionales que te ayudarán a administrar todos tus impuestos de la forma más sencilla y segura. No pierdas más tiempo, ¡contáctanos hoy!
Mientras, te invitamos a seguir leyendo nuestro blog para mantenerte informado sobre todas las novedades fiscales que pueden afectar tus impuestos.
