Existen múltiples formas de invertir nuestro dinero, cada una con sus ventajas y desventajas. Invertir en bienes raíces es una de las más antiguas, no sólo en Estados Unidos si no en todo el mundo. Pero con el correr de los años, este rubro se ha ido modernizando.
Hoy en día, existen muchas posibilidades para invertir en el mercado inmobiliario que no necesariamente tienen que ver con la compra/venta de inmuebles de manera directa. Una de ellas son los llamados REITS cuyas siglas significan Real Estate Investment Trust. Se trata de fideicomisos de inversión inmobiliaria que reúnen muchos de los beneficios de las inversiones en bienes raíces y muy pocos de sus riesgos.
Una gran ventaja de los REITs es que son una excelente opción para las cuentas de inversión con ventajas impositivas, como las cuentas de jubilación individuales (IRA), los planes 401K o las cuentas de ahorro para la salud (HSA), que no están sujetas a impuestos sobre ganancias de capital.
¿Qué son los REITs?
Los REITs son fideicomisos de inversión inmobiliaria. La forma de funcionamiento es muy sencilla: los inversionistas compran acciones en el fideicomiso y la empresa que administra el fideicomiso, es decir el REIT, transfiere los ingresos de sus participaciones a esos inversionistas. Es importante destacar que comprar acciones en el fideicomiso no implica la compra ni venta directa de los inmuebles, por lo tanto existe una gran diferencia con invertir en bienes raíces de manera tradicional.
Distintos tipos de REITs
En cuanto a los tipos de REITs, podemos decir que existen dos categorías básicas: los REITs de capital y los REITs hipotecarios. Sin embargo, muchos de estos fideicomisos son mixtos por lo cual se suma una tercera categoría: los REITs híbridos.
Los REITs de capital son fideicomisos que invierten en bienes inmuebles que luego alquilan obteniendo ingresos o venden y obtienen dividendos y ganancias. Justamente su popularidad y efectividad se basa en la combinación de estas tres fuentes de obtención de dinero.
Por otro lado estan los REITs hipotecarios que son las entidades que invierten en hipotecas y valores respaldados por hipotecas. Una diferencia importante respecto a los REITs de capital es que en este caso se obtienen intereses de las inversiones por lo tanto se ven afectados por las tasas de interés.
Por último se encuentran las entidades híbridas que, como su nombre lo indica, invierten tanto en el alquiler, compra y venta de bienes raíces como en hipotecas y valores respaldados por hipotecas.
¿Qué impuestos se cobran por invertir en bienes raíces?
Saber qué impuestos te cobrarán es el primer paso para saber cómo invertir en bienes raíces en USA y decidir si te conviene o no. No vaya a ser cosa que después termines teniendo que pagar más de lo que pensabas.
En este tipo de inversiones, los pagos de dividendos que se reciben pueden constituir ingresos ordinarios, ganancias de capital o rendimiento de capital. Todo esto se verá reflejado en el desglose del 1099-DIV que los REITs envían a sus accionistas cada año.
La mayor parte de los flujos de dinero provenientes de los REITs se tratan como ingresos ordinarios para el inversor y por lo tanto se gravan según su tasa impositiva marginal. Además a través de la Ley de Empleos y Reducción de Impuestos (TCJA) esta parte del dividendo puede recibir un tratamiento fiscal preferencial adicional.
Pero también puede ocurrir que parte del dividendo sea una ganancia o pérdida de capital. En estos casos, la situación impositiva es diferente. Incluso puede ocurrir que una parte del dividendo figure como rendimiento del capital no sujeto a impuestos.
Lo conveniente es analizar cada inversión de manera particular para así poder saber qué estrategia impositiva nos conviene seguir y sacarle el máximo provecho a los impuestos que pagamos… ¡o incluso invertirlos de forma tal que no nos los cobren!
